miércoles, 18 de julio de 2007

PENA DE AMOR

Bajas de esas montañas, con acordes
de agua, que cadencian tus pasos
Tus senos, ocultan un alma que desconozco
En las fragancias de tu cuello, se anegaban todas las flores

¿Quién eres?, ¿Quién llega?, te pregunté tímidamente
¿Llevas en tus manos flechas y cenizas encendidas?
¡Soy la brisa esperada, voy deprisa, y me dispersa el viento!
¡Llevo gotas de rocío en mi boca, cubiertas de miel enamorada!
¡Traigo para ti, leche azul, cuajada de besos!

¿Qué quieres?, te pregunté esperanzado
¡Deseo tu alma, y a vuestro noble corazón
desnudo!
¡Ven, tómalo!, te dije sin pensarlo

Mordiéronme tus labios de muérdago, y desaparecísteis
¿Quién era?, me pregunté aturdido
Entonces…
Me susurró al oído, un palomo del monte:
"Era una pena de amor que vino a verte…"

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